Las terapias, como todo, avanzan e innovan, a veces para bien y otras para mal. Yo soy de las profesionales que piensa que no hay que investigar con pacientes, no se puede jugar con su salud, pero también reconozco la necesidad de probar las cosas así que en mi caso, cuando pruebo algo nuevo, lo hago desde la perspectiva de que daño no va a causar. Este ha sido el caos de mi último hallazgo. Hace unas semanas me puse en contacto con la empresa graficasxpress.com, con la que estoy pensando en firmar un acuerdo, y le pedí dos paneles enormes, de dos metros, que tuvieran lo siguiente impreso:
- En la primera un Mandala enorme en blanco y negro para poder colorear y debajo una frase: soy válido.
- En la segunda pancarta habría un dibujo de un león también para colorear, rugiendo, y otra frase: soy como un león.
Lo que hice fue las pancartas dos pacientes en los que había pensado antes de crearlas, claro está, y les pedí que las colgaran en sus habitaciones y que cada día dedicaran un mínimo de treinta minutos a pintarlas.
Graficas Xpress hizo un trabajo perfecto porque la tela en la que imprimieron los dibujos era fácilmente pintable, no necesita de pintura especial ni nada y se puede colorear con lápices de colores y rotuladores simples sin problemas. La verdad es que hicieron todo tal y como se lo pedí y eso ha ayudado mucho a conseguir mi objetivo.
Los dos pacientes siguieron viviendo a consulta mientras realizaban la tarea encomendada y poco a poco, yo misma iba notando cambios positivos en ellos. Su estrés se reducía e incluso el hombre, que no quería hacer el trabajo que le pedí, acabó diciéndome que le relajaba pintar la pancarta y que había habido días que se había pasado hasta dos horas sin levantarse del suelo mientras pintaba.
Pintar y Colorear
Y es que hay muchos estudios que demuestran que pintar y rellenar dibujos coloreando es una gran terapia anti-estrés. Lo llaman arteterapia, una tendencia que vino de Francia como método para librarse del estrés cotidiano y que tras triunfar en EEUU se ha convertido en todo un fenómeno global. Yo no lo había probado aún pero pensé en lo de las pancartas gigantes como un aliciente y para que el paciente leyera esa frase, adaptada a su situación, cada día por la mañana y cada vez que entrara a su habitación para algo.
Colorear supone una gran distracción de los problemas que podemos estar sufriendo en nuestra vida diaria y mientras estamos coloreando, al menos durante un tiempo, podemos despejar la mente y centrarnos sólo en la actividad que estamos haciendo.
Además, utilizando nuestra creatividad para trabajar el dibujo y los colores estaríamos aliviando estrés y ansiedad, haciéndonos sentir más tranquilos y serenos.
Por último, es una gran manera de desconectar de mundo virtual al que estamos tan acostumbrados. Volver a coger el lápiz y el papel es una manera simple de entretenimiento, dejando de utilizar tecnologías que absorben tanto nuestra energía.